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La vuelta al escenario ...

... y es que sigo necesitando de la ayuda de alguien, algún desconocido que se atreva a decirme, de corazón y con buena voluntad, aquello que en ocasiones los amigos no saben o no pueden decirte, porque la confianza supera ese punto en que la sinceridad está nublada por la conciencia de "es que él es así".

Hoy tenía ganas de escribir algo ... recientes recuerdos que inútilmente trato de convertir en viejos han regresado súbitamente a mi cabeza, y esto unido a una terrible resaca y a la sensación de estar entrando otra vez en una dinámica absorbente que aporta escasos y dudosos resultados, hacen que vuelva a abrir un pesado y agobiante período de reflexión, del que sólo desprendo mi manía por huir del mismo.

Hoy he recordado que hace unos pocos días, Mayandra de Grecia me volvió a pedir una señal; si me encuentras, por favor, llámame para que pueda abrir los ojos y dejar de imaginar un mundo ideal que nunca llegará...

Retomar este blog me ha hecho visitar viejos blogs que ya no leía desde hacía tiempo ... y voy a pedirle a Eli prestado un párrafo de su último post ... porque se identifica perfectamente conmigo ... espero. Por cierto Eli, yo también sufro de pies planos :-)

Esta semana he llorado en los trayectos de autobús, a lo mejor por culpa de los tangos de Calamaro, a lo mejor porque me duele todo sin aparente explicación. Cuando era pequeña y me dolían los pies, cosa que al tenerlos planos como tablas de planchar me pasaba muy a menudo, mi madre me decía que era porque estaba creciendo. Debo estar creciendo ahora.

Gracias a todos los que estáis por ahí ...

Escuchando : Buika - (2005) Pa mis bicheros - 09. Soleá de libertad.mp3

 

1 comentario

Mayandra -

No hay de qué :).

Hace un tiempo me di cuenta de que las personas aguantan en este jodido mundo un día tras otro por un simple motivo: la esperanza de que alguien les encuentre por fin.

La madrugada del pasado 19 de noviembre mi mente no lograba desprenderse de esa palabra. 'Encuéntrame'. Googleé y me encontré contigo.

Aún sigo preocupada. Dime si tu padre está bien. No, mejor: dime que tu padre está bien.